Javier Asiáin – Promoción VI (1964)

Una de las grandes “gestas” del colegio Larraona Claret en su primera andadura fue sin duda la participación en el programa deportivo nacional Torneo a finales de los años 70. De la mano de su entonces profesor de educación física Javier Aguirre Zabaleta, el equipo del cole brilló en las pruebas de atletismo, especialmente en velocidad con triunfos de Javier Asiáin Díez de Arizaleta y el equipo de relevos (promoción VIª, nacidos en 1964).

A destacar también la participación en aquel equipo de Miguel Induráin Larraya, quien ya por entonces despuntaba en las pruebas físicas. Estos vídeos del archivo de RTVE de los años 1977 y 1979 recogen aquellos momentos épicos para la historia del cole. Entrevistamos a uno de los protagonistas, Javier Asiáin, hoy asesor laboral, quien atesora una memoria privilegiada y un cariño por el colegio digno de agradecer. Muchas gracias, Javier.

Hola Javier. ¿Qué recuerdos te vienen así de primeras a la mente de aquellas jornadas deportivas? Se trataba de una competición de colegios a nivel nada menos que nacional, en aquella España de la Transición y un colegio como Claret Larraona recién nacido.
La verdad es que me afloran un montón de recuerdos. Mi generación estrenó el colegio. Fuimos los primeros alumnos. El colegio participó en atletismo en las ediciones de Torneo de 1977 a 1979. El artífice de todo fue Javier Aguirre Zabaleta. En 1976 entró como profesor y revolucionó la educación física del cole. Por entonces también se fraguaba la afición por el baloncesto con Isidoro Pinedo. Javier Aguirre fue forjando un equipo entre clase y clase de Educación Física de los 80 alumnos que éramos por entonces en 6º de EGB. No sé cómo fue realmente el proceso ni cómo surgió la oportunidad. El caso es que Javier Aguirre inscribió al equipo del colegio en el programa Torneo. No eran muchas las disciplinas en las que se competía y Javier supo sacar un equipo puntero en cada una de ellas.

¿Y hubo entrenamientos específicos? Os imagino corriendo por el patio bajo una lluvia torrencial al estilo Carros de Fuego.
Javier Aguirre ya había ido formando poco a poco un equipo alevín en 6º de EGB. Recuerdo que desde fines de agosto, antes de iniciar el curso escolar, empezamos nuestra temporada entrenando cuatro días a la semana en el patio del colegio. Corríamos “crosses”. Si tocaba lloviendo, pues lloviendo. Las competiciones de disputaban en el entonces Ruiz de Alda, actual estadio Larrabide. La preparación fue muy buena. Hicimos una eliminatoria previa en Zaragoza que ganamos y nos clasificamos para la siguiente ronda que se celebraba en pista cubierta en Madrid.

¿Cómo fue el viaje a Madrid de aquellos chavales de 13 años de 7º de EGB?
Pues emocionados. Imagínate. Creo que era por Semana Santa. Viajamos en autobús a Madrid. Desde la ventana del hotel vimos una carga de los “grises”. “Veníamos de Pamplona” y la verdad es que no nos extrañó. Hicimos noche y al día siguiente llegó la competición.

A ver si puedo enumerar a los héroes de Torneo de 1977 como aquellas alineaciones de equipos que se decían antaño de memoria: Guerrero, Gómez, Induráin, Asiáin, De la Fuente, Pujol, Garro, Garayoa, los dos Alegrías y de entrenador Aguirre.
Eso es. Cada uno en su especialidad. José Antonio Garro Simón, Miguel Alegría Villanueva e Iñaki Alegría Izco solían ser los relevistas acompañados del velocista menos cansado en las pruebas anteriores. Javier Pablo Garayoa Arraiza estaba en la recámara. Jesús Ángel Guerrero Treviño corría los 50 metros vallas, Roberto Gómez Martínez en salto de altura, Miguel Induráin Larraya en 300 metros lisos, Alberto de la Fuente Galeano en 1.000 metros, Enrique Pujol Ruiz en 50 metros lisos y yo que hacía los 50 metros o 300 metros. En Madrid los relevos eran cuatro postas de 166 metros, que era la cuerda que tenía entonces el Palacio de los Deportes. En otras ediciones de Torneo hubo otras disciplinas de atletismo y también futbito, donde creo que más adelante compitieron otros colegios de Navarra. En las ediciones de atletismo de 1978 y 1979 tomaron parte que yo recuerde más alumnos del cole como Javier y Rafa Moreno, Javier y Alberto Aparicio, Alonso, Goñi, el recientemente fallecido Pablo Recalde Equiza…

¿Cómo era la equipación? Se os ve con aquellos chándals de letras grandes, dorsales cogidos por imperdibles… Y el gran Daniel Vindel en la retransmisión. Visto ahora con la distancia, le añadía una narración especial, además de la música de Tubular Bells de Mike Oldfield… ¿Cómo se vivía la emisión en casa? El resultado ya se conocía.
Íbamos con los colores del colegio, rojo y blanco, zapatillas de clavos. La pista era de tartán. Era peraltada, nada que ver con lo que estábamos acostumbrados en el patio del cole o en Ruiz de Alda. Y también recuerdo el ambiente que ahí se vivía, los padres de otros colegios animando con pancartas… Conocíamos el resultado pero no sabíamos qué día exacto lo iban a emitir. Lo veíamos en casa, con la familia, en aquellos televisores en blanco y negro de la época, viendo pasar programas hasta que llegara el nuestro.

La primera eliminatoria en Madrid fue todo un éxito, con grandes resultados por puestos y marcas como tu victoria en 50 metros lisos y el triunfo por todo lo alto en relevos (emitida por RTVE el 25/5/1977). Larraona se clasificó para las semifinales por la puerta grande. Pero lo que añade más épica a la participación general del colegio fue la forma en que se acudió a la siguiente fase, a las semifinales celebradas en junio de 1977 (emitidas por RTVE el 6/8/1977).
Aquello fue increíble. Sabíamos que habíamos hecho un buen papel, pero no estábamos seguros si finalmente habíamos conseguido clasificarnos para las semifinales. Teníamos que esperar al concurso de todos los colegios. Por si acaso, seguimos entrenando con el mismo ritmo. Y una mañana de junio, estando en el cole, de repente nos sacan literalmente de clase y nos dicen que teníamos que ir rápidamente a Madrid. Tal cual. La organización de Torneo había llamado al cole preguntando a ver qué pasaba que el equipo de Larraona Claret no se había presentado. Nos habíamos clasificado y el aviso por lo visto no había llegado al cole. Sin pasar por casa, nos metieron en dos coches y salimos pitando para Madrid. Íbamos con la ropa de competición que teníamos en el cole. Por eso en el vídeo de ese día se nos ve con medias y equipaciones distintas. Algunos como yo corrimos con calcetines negros de calle. El inicio de la competición se retrasó por nosotros. Javier Aguirre tuvo que improvisar cambios en las participaciones. Yo pasé por ejemplo a correr el 300 metros. En el cómputo general al final quedamos segundos y por muy poco no entramos en la final por equipos. Una pena. Pero sí que conseguimos tres atletas y el relevo alcanzar las finales individuales por marcas.

Las finales individuales se disputaron en Oviedo. Ahí resultaste vencedor absoluto en los 300 metros. Y además las chicas del colegio Santa Catalina de Pamplona ganaron por equipos.
En la final de Oviedo Jesús Guerrero, “Chucho”, creo que quedó quinto en 50 metros vallas. En el relevo conseguimos un meritorio tercer puesto. No recuerdo el resultado final de Alberto de la Fuente en 1.000 metros. Yo tuve la suerte de ganar el 300 metros. El equipo femenino de Santa Catalina lo hizo francamente bien y también ganaron. Chicos y chicas grabábamos en días distintos. Coincidíamos con ellas en el Ruiz de Alda.

Los premios para los vencedores. Había motocicletas, bicicletas, material deportivo, relojes… ¿Qué premio te dieron?
Una pasada. Salir en la tela ya era la bomba. Y ganar ni te cuento. Las atletas de Santa Catalina recibieron una Mobilette cada una. A mí me dieron material deportivo. Y como ganadores de la final nos obsequiaron con un viaje a Roma y Atenas. Yo no me lo podía creer. Y ahí que me fui con las chicas de Santa Catalina, tan contento.

¿Creó el atletismo escuela en el colegio tras aquellas participaciones en Torneo?
Sí. El mérito sin duda lo tuvo Javier Aguirre, “JA”. Para mí fue como un padre, una grandísima persona. Se implicaba muchísimo. Si había que colocar vallas, si había que comprar material, si había que llevarnos en coche a tal prueba u otra, ahí siempre estaba. Lo mismo que los claretianos Félix Zubiría, director por aquel entonces del colegio y Ramón Najarro. Javier Aguirre fue un gran profesor, un maestro que revolucionó la educación física en el colegio. Pasamos de la nada al todo de forma muy rápida. Al poco pasó a ser preparador físico de Osasuna. El testigo y filosofía de Javier Aguirre lo recogió Miguel Alegría Villanueva, un gran profesional de la Educación Física y actual profesor de Educación Física en Escolapios. Yo también estuve de entrenador unos años, pero lo tuve que interrumpir por el servicio militar. Josetxo de Sola continuó con la labor de especialización. Hubo años con buenas hornadas de atletas. Ahora lo lleva Enrique Eguillor a través del club Larraona. El atletismo afortunadamente continúa vivo en Larraona, tanto en chicos como en chicas. Me hace especial ilusión ver a los más jóvenes. Tengo un gratísimo recuerdo de haber podido representar al colegio Larraona Claret. Ahora este tipo de competiciones por equipos de colegios parecen imposibles.

Parece como que flotaba en el ambiente cierta conexión, cierto sentimiento de pertenencia al grupo de clase y al propio colegio que no hay desdeñar, como puede verse en el Torneo Interescolar de fútbol-8 que organiza Osasuna en Tajonar. La pregunta es obligada. ¿Qué tal con Miguel Indurain? ¿despuntaba ya?
Muy majete, aunque en el grupo tardamos en conocerlo porque “Indu” era de otro curso. Se le veía muy fuerte en las pruebas que exigían mantener un ritmo alto de velocidad durante un tiempo constante, como luego demostró en las contrarreloj y en su estilo tan potente de rodar en bici. Tenía esa cualidad innata. Los demás participantes de Torneo creo que casi todos nos vinculamos de alguna manera al mundo del deporte como entrenadores o profesionales como Miguel. No veas cómo le animábamos cuando lo veíamos por la tele. Todo un orgullo para nosotros haber compartido con él aquellas experiencias.

¿Cómo recuerdas tus días de cole?
Tengo muchísimos recuerdos. Daría para varias entrevistas. Estuve el ciclo completo hasta 3º de BUP. Mi cuadrilla de amigos es precisamente la de atletismo y baloncesto. Nos conocemos desde los 6 años. En los primeros años el colegio todavía estaba en obras. Recuerdo los pintores en las plantas tercera y cuarta e incluso cómo pasaban los rebaños de ovejas por medio del patio. El edificio estaba al final de la Avenida Pío XII. Solitario. Llegar hasta ahí era toda una aventura, cruzando huertas y una fábrica abandonada por donde está ahora el hotel. No había pupitres para todos. En su defecto algunos tenían esterillas que colocaban en el suelo. En la publicidad del cole ponía que iba a tener piscina. Cuando veíamos a los trabajadores hacer un agujero en el patio ya pensábamos que se iniciaban las obras de la piscina. Me acuerdo de las “Seños”, de los profesores. Ahí te podría dar uno de esos listados de carrerilla con todos los nombres.

Por último, creo que no faltarás a los eventos del Cincuentenario del colegio que se cumple en 2020.
No me los pierdo. Me lo pasé en grande en el 25º Aniversario recordando viejos tiempos y reencontrándome con compañeros, poniéndonos al día de todo y viendo cómo ha crecido el colegio. También acudo puntualmente a los encuentros de aniversarios de mi promoción. Agradezco en este sentido la labor de Antonio Galarza en su día y ahora de Carlos Pagola y la Asociación de Antiguos Alumnos. Para lo que sea, aquí me tenéis.